Esa debe ser la actitud!

Mirar más allá de las apariencias, lo que la vida nos está tratando de enseñar.

Porque siempre que la vida desee enseñarte algo basado en Amor Propio lo hará, no de la

manera más fácil, al contrario, te retará. Y un reto no se convierte en reto a menos que se le

incluya el ingrediente de la actitud. Una actitud de empuje... un enfrentamiento con una situación fuerte donde tu intención será sacarle lo que sea que es mejor para tu crecimiento emocional, mental, físico y espiritual. O sea ó tomas la actitud de achantarte ó tomas la actitud de crecer.

Pero qué cosas desean hacer los desafíos en tí? Pudiera ser: a conocerte más, a descubrirte, a descubrir cómo te tratas a tí mism@ (por ende a los demás) en medio de las crisis y saberlo

reconocer, a tocar y entender cuales son tus verdaderas necesidades, a soltar, a despedir las

expectativas que te frustran tanto, a tomar decisiones, a impulsarte, a aceptar lo que se puede cambiar y lo que no, a aceptar lo que quieres o no quieres en la vida, a ordenar tus prioridades, a perdonar, a mejorar el manejo del tiempo libre, a reconocer que eres humano, que está bien errar, a levantarte porque esta no es tu hora y largo camino te resta, a reconocer que esta bien pedir ayuda... y tantas, tantas otras lecciones que nuestro Poder Superior, Dios de Amor, desea que aprendamos.

Y la vida comenzará a ser más fácil de lo que imaginamos! Porque todo lo que desea es volver a llevarnos a ser como los Niños; claros, honestos, transparentes con ellos mismos por lo tanto con los demás. Los niños van aprendiendo mientras juegan. Y mientras juegan van creciendo y desarrollándose. Es también a través del juego que van procesando todos los acontecimientos personales, familiares y circunstanciale. "So" Así que, no dejes de jugar aun en medio de tu crisis. Ya sé, no es lo que nos han enseñado, ni la Sociedad ni, la religión... Pero sin embargo fue Jesús el que dijo "que tienes que ser como un niño". Así que buscar cosas que hacer que te agradan y te gustan ayudará a proteger tu salud mental.

Rompe con la creencia de que sentirte mal o culpable por otros te hace una buena persona.

Eso es una creencia bien disfuncional, no te ayuda a tí y de seguro no ayudará a otros. El

mismo Jesús sabía cuando distanciarse e irse a solas a conectarse consigo mismo y con Dios. Era su tiempo para el solito. Así que pensar en uno no está mal; es importante y le dá balance a nuestra vida.

En esta "crisis" deja que las cosas fluyan. Vive y deja vivir, ¡Puedes hacerlo! Activa la

creatividad que te fue dada y emprende, construye, edifica un camino nuevo en medio de ella.

GC